La Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Michoacán informó que ha implementado un operativo en conjunto con las fuerzas federales y estatales en la región Lerma-Chapala con el fin de localizar a víctimas de desaparición forzada.
Mediante el uso de drones, las fuerzas del Ejército mexicano, Guardia Nacional, Guardia Civil y Fiscalía estatal están llevando a cabo búsquedas en áreas de los municipios que limitan con el estado de Jalisco.
En caravanas, los agentes recorren zonas rurales en Zamora, Jacona, Sahuayo, Jiquilpan, Venustiano Carranza, Briseñas, Villamar, Tangamandapio y otros lugares.
En total, abarcan más de tres mil kilómetros en la región Lerma-Chapala, donde se están implementando diversas acciones en la búsqueda de personas desaparecidas.
Esta área de Michoacán ha sido testigo de un aumento significativo en desapariciones y hallazgos de fosas clandestinas, como lo ocurrido en Villamar en el terreno conocido como Los Negritos.
De acuerdo con los informes policiales, más de 700 personas han sido reportadas como desaparecidas en la zona conocida como el “Corredor de la Muerte”.
Entre los casos más recientes se encuentra la desaparición de tres jóvenes: los hermanos Primo y Bernardo de Jesús Cruz Medina y Edgar Jafet Tavira Adame. Después de entregar muestras de aguacate en el aeropuerto de Guadalajara, Jalisco, regresaban a Michoacán y perdieron contacto en Jiquilpan.
La Fiscalía de Michoacán informó que en el año 2022 se reportaron mil 829 personas desaparecidas, de las cuales mil 79 fueron encontradas, lo que significa que 750 personas aún no han sido localizadas.
En lo que va de este año, mil 697 personas han sido reportadas como desaparecidas, y mil 269 de ellas han sido localizadas.
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